miércoles, 17 de septiembre de 2008

EL DISERNIMIENTO DEL LLAMADO AL DIACONADO PERMANENTE

Dentro de toda la etapa de formación para el Diaconado Permanente , especialmente durante la primera etapa de disernimiento es común que el hombre interesado trate de buscar información , no es tan fácil, existen muy pocos libros.
A continuación les comentaré algunos puntos importantes que encontré en el "DIRECTORIO NACIONAL PARA LA FORMACIÓN, MINISTERIO Y VIDA DE LOS DIÁCONOS PERMANENTES EN ESTADOS UNIDOS" el cual fué elaborado por el Comité de obispos sobre el Diaconado de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos.

EL DISERNIMIENTO DEL LLAMADO

Disernimiento personal:
169. Las primeras señales de la vocación al diaconado se perciben en el ámbito personal y por lo general comienzan con la búsqueda de información sobre el diaconado y su formación. Aquí un individuo inicialmente reflexiona sobre la naturaleza de los que percibe como un llamado. Debe darse primacia en ese momento a la dimensión espiritual, en cuyo centro se encuentra la orientación espiritual. Toda jornada espiritual es personal e individual, por tanto requiere una orientación personal. El párroco y otros miembros del personal de la parroquia son recursos particulares en este momento.
Disernimiento familiar:
170. Como la mayoría de los interesados en el diaconado son casados, debe recomendársele que presten particular atención a comentar su posible vocación con sus esposas y sus familias. La información y las charlas iniciales con el párroco y otros deben ayudarlos y animarlos. Para un hombre casado , el apoyo y consentimiento de su esposa son necesarios. Por lo tanto, ambos esposos deben asegurarse de comprender claramente el significado de ese apoyo y consentimiento, aún en esta temprana etapa de disernimiento. Muchas regiones y culturas enfatizan la participación de los familiares. Ésta también es una importante consideración para el disernimiento.
Disernimiento de la Comunidad
171. La solicitud y eventualmente la aplicación para entrar a la formación diaconal no es solamente una jornada personal y familiar. La Iglesia debe acompañarla. La parroquia es la primera experiencia de la Iglesia para la mayoría de los interesados. es reponsabilidad de esta comunidad y, particularmente, de su párroco, invitar de entre sus miembros a aquellos que pueden estar calificados para servir como ministros ordenados de la Iglesia. Similarmente, aquellas agencias de la Iglesia y de la comunidad que con frecuencia cumplen la misión de caridad y justicia en la Iglesia, tienen una oportunidad única de invitar a candidatos apropiados de su personal.
Disernimiento Eclesial
172. Las averiguaciones sobre el diaconado y el proceso de formación finalmente incluyen a la Iglesia diocesana. Las sesiones de información, la exploración de los criterios para una vocación diaconal, y el consejo particular presentado por la oficina del Diaconado pueden ayudar a un individuo en una decisión de continuar con una solicitud formal.
Cuidadoso escrutinio
173. Cuando el interesado es presentado por su párroco y somete su solicitud, comienza el proceso formal de admisión. El disernimiento inicial continúa con particular énfasis en la capacidad y el potencial del solicitante para el ministerio ordenado. Tanto el solicitante como la iglesia diocesana entran en un intenso proceso de selección.

Estoy seguro que muchos de los que ahora están leyendo este artículo se encuentran dentro de la etapa de disernimiento, buscando información, tratando de entender con el intelecto si el Diaconado Permanente es lo que el Señor quiere para mí.
Quiero humildemente complementar estas etapas de disernimiento con la etapa de la Oración. Hay que pedirle al Señor que nos ayude en este momento tan importante, que sea Él quien nos apoye junto a su Madre, nuestra Madre la Santísima Virgen María.
Saludos en Cristo